Torrelapaja, lunes 21 de octubre de 1929
“Hoy es un día grande para nuestro pueblo. Hoy llega a él la prosperidad y el desarrollo.
Estoy un poco nervioso porque importantes personalidades nos visitan. Todo ha de salir bien. Es la imagen de Torrelapaja la que está en juego. Es aquí donde va a tener lugar la ceremonia inaugural del tren entre Calatayud y Soria y han elegido Torrelapaja por estar en medio.
¡Ay, cómo me gustaría poder ver qué ha sido de mi pueblo y de su estación dentro un siglo! ¡Cómo me gustaría tener entre mis manos El Noticiero o La voz de Aragón y leer acerca de los festejos que tendrán lugar como conmemoración de este día grande dentro de 50-90-100 años! ¿Cómo será la vida? ¿Habrán cambiado muchas cosas?
El día ha amanecido con lluvia, pero en estos momentos ha parado y aunque hay nubes, parece que el tiempo va a respetar todos los actos que hay preparados”.
Este podría ser perfectamente el testimonio de Víctor Martínez García, alcalde de Torrelapaja, aquel 21 de octubre de 1929. Podría ser una breve reseña en su diario, bastante ajustada a la realidad y, tal y como comentaba en mi anterior artículo “Un practicante de principios del siglo XX. ¿Quieres conocer sus secretos?” aquí está el relato de la inauguración del Ferrocarril Santander- Mediterráneo (S.M.)
¿Quieres saber que pasó después en Torrelapaja? Sigue leyendo y descúbrelo.
¿Cómo se gestó este proyecto ferroviario?
El proyecto del ferrocarril S.M. nació en 1908 como consecuencia de la modificación de un proyecto anterior y con la finalidad de unir Santander con Valencia, pero no llegó a concluirse.
Existió un objetivo militar, además del de dar salida al mar a las mercancías de las provincias interiores. Para poder llegar al Mediterráneo, la línea enlazaría con el Ferrocarril Central de Aragón (Calatayud-Sagunto).
Construcción de la línea S.M.
Las obras comenzaron en 1925, a cargo de la sociedad The Anglo – Spanish G. Lid, de capital y dirección británica y predecesora de la Compañía de Ferrocarril Santander – Mediterráneo. La intención fue instalar doble vía de ancho ibérico en el futuro.
Los 366 km de la primera fase entre Calatayud y Cidad-Dosante (Burgos) fueron acometidos en 6 tramos y aunque se realizaron parte de los trabajos de explanación y obra civil de la segunda fase entre Cidad-Dosante y Santander, nunca se instalaron los 63 km de vía férrea existentes entra ambas estaciones. La orografía del terreno hizo que se discutieran varios proyectos y el trazado definitivo fue aprobado en 1941, pero la llegada del automóvil y su cada vez mayor utilización descartaron el tren como medio de transporte prioritario.
En la línea de ferrocarril S.M. no se escatimaron medios para su construcción, tanto en tecnología de señalización, comunicaciones y organización, como humanos. Las estaciones fueron equipadas con instalaciones de calidad para los viajeros y muy funcionales para los trabajadores.
Fue el mejor ferrocarril en calidad de vía de RENFE de la época y la implantación de las vías de transición y otras mejoras en la vía fueron adoptadas posteriormente en toda la red ferroviaria española.
Para la construcción del tramo Calatayud-Soria utilizaron piedra de la cantera de la estación de Torrelapaja y del paraje de la Huesera, que probablemente fue un cerro de piedra. La piedra extraída para hacer las alcantarillas, pasos subterráneos y túneles, como el de las Hoyas y la Tejera, fue labrada para usarse en edificios, andenes, etc y la sobrante o más pequeña, utilizada por el tío Juan “Carpintero” y su hijo Félix para construir el nuevo cementerio, inaugurado en 1928. Los trabajadores se hospedaron en el pueblo, lo que hizo que tuviera más vida y aumentara su población.
Inauguración del tramo Calatayud-Soria en Torrelapaja
Entre vítores y aplausos uno de los trenes inaugurales salió de Calatayud a las 15 horas del día 21 de octubre de 1929 y era recibido con gran alegría por todas las localidades por donde pasaba.
A su llegada a Torrelapaja, el andén se llenó de autoridades locales, provinciales, jefes de la compañía, invitados ilustres y gente sencilla del pueblo que acudieron a participar en tan gran acontecimiento. El tren con las personalidades sorianas y burgalesas había llegado unos instantes antes.
En el libro “Historia del ferrocarril en Aragón” de D. Daniel Felipe Alonso Blas, exjefe regional de gestión del transporte de RENFE en Zaragoza, aparece una relación detallada de las personalidades que viajaron en ambos trenes, lo que demuestra la importancia y relevancia del acontecimiento. Un extracto de dicho libro puede encontrarse también en la web de Torrelapaja.
El Hotel Muro de Calatayud sirvió un ágape para todos los asistentes, seguido de un improvisado baile amenizado por la banda de música de Soria y una visita, con detalle incluido, a la fábrica de harinas “La Esperanza” por invitación de sus propietarios, la familia Miguel-Sauca.
El día terminó con un brindis de los gobernadores de Soria y Zaragoza y los alcaldes de Calatayud y Soria. El alcalde de Zaragoza excusó su presencia con un telegrama enviado al alcalde de Calatayud.
Después de las despedidas, los viajeros ocuparon el tren opuesto al que habían venido y partieron hacia sus respectivas poblaciones de residencia, tras la autorización del jefe de estación de Torrelapaja, D. Rafael Gutiérrez.
¿Más información?
Si quieres conocer más detalles sobre la construcción de esta línea de ferrocarril, puedes acudir a la web Ferrocarril Santander-Mediterráneo y la revista del ferrocarril Vía Libre. Son algunas de las principales fuentes de información que he utilizado para la elaboración de este artículo. Lamento no haber encontrado a nadie que recuerde aquel 21 de octubre de 1929. Si conoces a alguien que todavía sea capaz de contarnos detalles al respecto, estaré encantado de modificar este artículo para incluirlos.
Me gustaría escribir otros artículos acerca de la estación de Torrelapaja, otras estaciones de la misma línea y vivencias o anécdotas de los 55 años en que el ferrocarril discurrió por nuestras tierras, como, por ejemplo, la mencionada en mi post “Invierno, ¿cómo era la vida cuando realmente hacía frío?”. Por favor, deja tus comentarios más abajo para que pueda incluirlos en futuros artículos o escríbeme un email a oficina@carlosrubio.me y daré eco a tan entrañables experiencias.
8 respuestas
Genial, Carlos. Cómo lamento no haber preguntado más a los abuelos, por ésta y por otras historias de la vida cotidiana. Gracias por recopilar nuestra historia. Y de forma tan amena
Gracias Dolores. Es verdad, yo lamento no haber empezado a escribir estas historias antes.
Carlos,que artículo más completo.Me emociono al leerlo .Gracias.
Gracias Almudena. Me alegra saber que hay gente que comparte el mismo sentimiento que tengo al escribirlo.
Mejor que el tio Vitor no viera el estado en el que se encuentra la estación y la vía 90 años después. Una pena.
La idea de unir el Cantábrico con el Mediterráneo era excelente y el camino natural, el trazado del SM. Pero, como siempre, País Vasco y Cataluña ganaron (con el puerto de Bilbao y el de Barcelona). Hoy se sigue reivindicando esta ruta. A ver dentro de 90 años.
Dentro de 90 años debería haber un hotel rural en la estación de Torrelapaja
Muy interesante Carlos. Felicidades de nuevo por rescatar la historia de Torrelapaja y dejarla escrita para los que vienen detrás de nosotros.
Seguramente ya lo habrás investigado, pero en el primer año del siglo XX ya hubo otros dos proyectos de ferrocarril que tenían a Torrelapaja como principio de línea: uno que comunicaba con Olvega (para aprovechar la cercanía de minas de carbón y minas de hierro, algo que también por esos años se comenzó a mover en Bilbao), y el otro que comunicaba directamente Torrelapaja con Calatayud, para darle salida al carbón hacia la línea Zaragoza-Madrid. Te envío por mail dos recortes de la prensa de la época (años 1900 y 1901) que hablan de estos dos proyectos.
Por cierto … ¿minas de carbón en Torrelapaja? … ahí queda la pregunta, como reto para un próximo post.
Muchísimas gracias Jose. Pero, ¿de dónde sacas esos artículos de periódico tan interesantes y tan antiguos?
Recojo el guante y a ver si, dentro de poco, puedo poner a disposición de los lectores de mi blog un artículo sobre las minas de carbón de Torrelapaja.